
Este tipo de empastes, que están muy extendidos han sido prohibidos en varios países que consideran que representan un riesgo para la salud. Algunos dentistas consideran que realmente constituyen un riesgo y recomiendan sustituirlos mientras que otros no ven un riesgo.
La amalgama es una aleación de mercurio con plata, estaño, cobre, zinc u oro, entre los cuales, evidentemente el más tóxico es el mercurio y es el centro de debate. Unos siete empastes de amalgama constituyen aproximadamente 2 gramos de mercurio puro. Teniendo en cuenta que un único gramo de mercurio, produce la muerte si es inyectado directamente en vena, evidentemente, es lógico plantearse la duda sobre la peligrosidad de dichos empastes. Por poner un ejemplo, en Alemania, la media de empastes por ciudadano es de 12, con una equivalencia de unos 3 o 4 gramos de mercurio.
Es de suponer que existirán estudios sobre este tema, por lo que podemos plantearnos: ¿Todo este mercurio es realmente tóxico y conviene reemplazar cualquier empaste existente o en cambio no representa ningún riesgo por tratarse de cantidades muy pequeñas?